Toca darle un empujón a esta sección, que mucho ir comiendo por ahí, pero escribir más bien poco. A falta de la excepción de la gran visita a La Camarga, los deberes están sin hacer desde el día 20 de junio, en que nos dirigimos Edu, David y servidor de ustedes a ver qué tal iba a ser la paella menusera de un garito de los que llevan muchos años dándolo todo en plena Rambla Catalunya: La Bodegueta.

Una vez más, desconfianza. Ya tenía claro que de la Bodegueta siempre se sale contento por platos como los huevos estrellados pero lo del arroz siempre causa respeto. Será por eso que cuando nos plantearon escoger entre terraza o interior crucé los dedos pensando en la segunda opción. Un chasco en el panorama terracístico de Rambla Catalunya hubiese sido doble chasco. Manías que tiene uno a las terrazas de esa calle, mire usted.

Sentados y rodeada la mesa de cañas, nos dispusimos a empezar con el menú de 12 Leuros que se ofrece a diario en el lugar. Primer plato paella, como viene siendo habitual (parece que no, pero sigo teniendo en mente encontrar explicación a su condición de primer plato). Dejando aparte que el animalito fue fresco hasta que lo congelaron y que el arroz aparentaba no ser de los que se pasa, debe reconocerse que la cosa cambió al meter cuchara. Había calamar, algo de molusco y un buen fumet de base para que la ración desapareciese rápidamente. Del segundo no les puedo hablar más allá de que recuerdo que era un escalope de ternera rebozado. Lo malo de ponerse tan tarde a actualizar entradas es eso, que un gruyerizado cerebro no da para más recuerdo.

Que aproveche.