Bar Resolís (Gràcia)
Carrer de Tordera, 28
L3 Fontana L5 Verdaguer
Templo gracienc cerrado el 28 de marzo de 2013 por jubilación de Joaquín, su ilustre e histórico dueño.
Entrada original:
Esta es una de aquellas entradas en las que, si bien ha andado en la recámara durante meses, el lugar ha cerrado antes de que pudiese estar en entre las fichas de garitos en activo de esta web. Pero, a pesar de ello, el cariño que se le tenía -y tiene- a Joaquín sumado a la importancia de este lugar para la zona merecen que no caiga en el olvido. Se comenta que es posible que el Resolís se transforme en bar/sede-social de la CUP bajo el nombre de la nova barraqueta pero, sin tener acceso directo a esa información, se queda a la espera de que el rumor se confirme o desmienta con los propios acontecimientos.
Entrando en materia, el Resolís era (cómo fastidia escribir en pasado) uno de aquellos lugares que, como tantos, servían de centro de encuentro de la gente del barrio. Pero éste tenía ese algo, tan complicado de describir, como es situarse en plena Plaça del Raspall, uno de los pilares de la Vila de Gràcia aún no siendo una de las escogidas por el stablishment como icono del barrio.
Si la memoria no falla, Joaquín se hizo cargo del local a finales de los años 70, cuando se encontró con un Resolís que era más propiamente una bodega que al final de sus días. Contó con antiguas neveras de obra que se abastecían de barras de hielo y con barriles que albergaban vermut y vino a cascoporro. Pero Joaquín, debido a lo complicado de su mantenimiento, según nos dijo en una de las últimas visitas que le hicimos junto con los hermanos de mededebebe, se vio obligado a prescindir de ello y darle el aspecto que lució hasta sus últimos días.
Por el camino, ofreció a su parroquia generosas raciones de calamares, callos, morro frito o sus bravas. Completadas éstas con vermut casero, vino a granel o el guardia civil, esa peligrosa mezcla de Pippermint y cerveza que podía degustarse con una mediana (sargento) o con un quinto (cabo). Tanto nos encandilaba el lugar que, cuando la decisión de cerrar estaba tomada, el Resolís fue la sede de los 1os Juegos Paravermulímpicos o la 13ª edición del Vermut Gràcia.
Sea cual sea el devenir del Resolís, esperemos que no caiga en el olvido. Por Joaquín y su parroquia.
¡Salud!
